Momentos en que el escritor brasileño Eric Nepomuceno inauguraba los trabajos del Premio Casa 2014.
Pedro de la Hoz
El intelectual brasileño Eric Nepomuceno calificó en La Habana el rescate de la dignidad como el gran legado y la obra mayor de la Revolución cubana, al pronunciar las palabras inaugurales del Premio Literario Casa de las Américas 2014.
Luego de confesarse conmovido y honrado por la invitación a formar parte del jurado, el versátil y comprometido escritor se refirió a su relación con Cuba y la institución fundada hace 55 años por Haydée Santamaría, la cual visitó por primera vez 36 años atrás.
Significó la contribución que entonces dio la Casa "para acorralar un poquito más a una dictadura que empezaba a desmantelarse" en el gigante sudamericano, y cómo fue "aquí que intelectuales y artistas brasileños que vivían en Brasil, en tiempos de aislamiento y desconfianza hacia los vecinos, empezaron a descubrir a América".
Autor de títulos de cuentos como Contradanza y otras historias, y Antes del invierno; traductor al portugués de obras de Eduardo Galeano, Julio Cortázar, Gabriel García Márquez, Juan Carlos Onetti y Laura Esquivel; y columnista de importantes diarios de la región, Nepomuceno valorará, junto a sus compatriotas Luiz Bernardo Pericás y Suely Rolnik, los textos que concursan en la categoría de literatura brasileña.
Al abundar acerca de su percepción de la Revolución cubana, el escritor expresó: "Creo que es la historia de varias utopías que se renuevan y se renacen. Y que son la prueba incontestable que esta Isla vive construyendo su propia historia, buscando trazar su propio destino, con aciertos y errores, como es propio de la naturaleza humana, pero con un ingrediente cada vez más raro en nuestros tiempos: el ingrediente ese que sigue abrigado y vivo en la mirada de los cubanos".
La velada, que comenzó con una evocación al recientemente fallecido poeta argentino Juan Gelman —muy cercano a la Casa había aceptado ya ser el protagonista de la próxima Semana de Autor que tradicionalmente auspicia la institución en noviembre—, contó con la presencia de Abel Prieto, asesor del Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros; Miguel Barnet, miembro del Consejo de Estado y presidente de la UNEAC; Roberto Fernández Retamar, presidente de la Casa, y representantes del cuerpo diplomático de América Latina y el Caribe.
Al presentar uno a uno los jurados, Jorge Fornet, coordinador del certamen, anunció como única variante la inclusión en la terna que juzgará los ensayos de temas artísticos y literarios a la cubana Zaida Capote, debido a la ausencia imprevista del argentino Saúl Sosnowsky.
Desde ayer mismo los jurados se trasladaron a Cienfuegos, ciudad en la cual a lo largo de una semana leerán los originales. La labor más ardua recaerá en la mexicana Rosa Beltrán, la chilena Alejandra Costamagna, la dominicana Ángela Hernández Núñez, el panameño Carlos Wynter Melo y el cubano Emerio Medina, que tendrán que dirimir el triunfador entre más de 200 volúmenes de cuentos, récord de participación en el género.
Los resultados de Casa 2014 se darán a conocer el 30 de este mes.
Tomado de Granma
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