Los caminos de Cuba en defensa de los derechos de
los seres humanos, más allá de su orientación sexual, han sido
escuchados en la XXVII Conferencia Mundial de la Asociación
Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersex (ILGA)...
Yisell Rodríguez Milán
Al menos el 40% de los homosexuales y el 65% de las personas trans de
América Latina han sufrido, por ejemplo, violencia homofóbica en el
ámbito escolar. (http://ilga-lac.org)
"Descolonízate", eso es lo que nos dicen los 15 cubanos que asisten a la XXVII Conferencia Mundial de la Asociación Internacional deLesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersex (ILGA),que
tiene lugar entre el 27 al 31 de octubre en México, y yo solo puedo
pensar, de leer la frase, en el poema de Carilda Oliver que decía: “Y yo
tan seria, tan formalita,/ tan buena joven, tan señorita, / para
ocultarte también mi sed/ te hablo de libros que no leemos,/ de cosas
tristes, del mar con remos;/ te digo: usted...”
Pero está claro que quienes fueron desde Cuba hasta el país del “Jalisco no te rajes”, quizás uno de los más machistas y homofóbicos de América Latina (al menos en el imaginario colectivo de los isleños), no viajaron tantos kilómetros para redimir los derechos sexuales de los heterosexuales, que son, a fin de cuentas, los que ensalza la poetisa. De hecho, al menos el 40% de los homosexuales y el 65% de las personas trans de América Latina han sufrido, por ejemplo, violencia homofóbica en el ámbito escolar, según reveló en México Mary Guinn Delaney, asesora regional en Educación para la Salud de la UNESCO. Por eso, en el marco de la Conferencia, los participantes intercambian sobre el activismo social contra la discriminación por orientación sexual e identidad de género, así como sobre asuntos medulares para las personas trans como el acceso a la salud o las formas de interconectar las actividades que desarrollan las asociaciones que las nuclean en diferentes partes del mundo. Otro punto, y sobre este ya debatieron, fue la revisión en 2017 de la Clasificación Internacional Estadística de Enfermedades y Problemas Relacionados con la Salud, desarrollada por la Organización Mundial de la Salud, a fin de que se retiren las categorías trans del capítulo de “Trastornos Mentales y del Comportamiento”. Francisco Rodríguez Cruz, conocido periodista y bloguero cubano, forma parte de la delegación cubana. En su blog, donde se presenta como “martiano y periodista; comunista y gay; ateo convencido y supersticioso ocasional” posteó antes de salir de Cuba: “Será también una buena oportunidad para quienes dentro de este movimiento quieran conocer más sobre la singular experiencia de Cuba en el activismo social contra la discriminación por orientación sexual e identidad de género, a partir del compromiso y liderazgo del Cenesex como entidad estatal, y mediante una estrategia educativa encaminada a sensibilizar a la población e incidir sobre los decisores gubernamentales para lograr avances en las políticas públicas y en la legislación”. También reseñó las palabras de Manuel Vázquez Seijido, coordinador de las redes sociales comunitarias apoyadas por el Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), quien comentó dos datos de interés. El primero es que esta es la mayor participación de activistas LGBTI en un evento internacional fuera del país hasta la fecha y el segundo que Cuba presentará su candidatura para optar por la sede de la próxima Conferencia Mundial de Ilga, que sería en el 2016, además de intervenir en los diferentes talleres, grupos de discusión, plenarias y paneles del encuentro, cuyo lema es “Descolonizando nuestros cuerpos”. DESDE EL LUGAR DE LOS HECHOS En un segundo post, escrito desde México, postea que en las cinco jornadas de la Conferencia Mundial la representación cubana acaparó la atención de los presentes. La delegación está presidida por la diputada Mariela Castro Espín, quien también es directora del Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex). Le acompañan integrantes de los grupos de personas trans y de mujeres lesbianas, de las redes de Juristas y de Jóvenes, y del grupo Humanidad por la Diversidad (HxD), todos vinculados al Cenesex, así como una representación de la sección de Diversidad Sexual de la Sociedad Cubana Multidisciplinaria para el Estudio de la Sexualidad (Socumes). Hay especialistas de todo tipo entre ellos: contadores, agentes de seguridad y protección, varios licenciados en Derecho, una Intérprete y traductora de lengua rusa y no pocos trabajadores de la salud. En declaraciones a la agencia Prensa Latina, Mariela Castro explicó que Argentina, Uruguay, el Distrito Federal de México constituyen referentes en materia legislativa sobre asuntos de orientación sexual e identidad de género. Destacó también que los temas de LGBTI son “ideológicos y políticos”, y la Conferencia Mundial de la Ilga a la que asiste es un espacio de activismo importante en esas dos direcciones. Sobre los participantes dijo: “Muchos de ellos son jóvenes formados en el Cenesex y otros no son tan jóvenes, pero igual somos un grupo de personas que lleva adelante el trabajo de ir cambiando conciencias, esa cultura de dominación heredada de sociedades basadas en la explotación de los seres humanos” y añadió que, aunque hagamos revolución, aunque estemos en un proceso de transformación socialista, “no se cambian tan rápidamente los prejuicios, no se introduce tan rápidamente la ideología revolucionaria en todas las áreas de la vida”. Para Manuel Vázquez Seijido, asesor jurídico del Centro Nacional de Educación Sexual, Licenciado en Derecho y Máster en Criminología, estar en Ilga México 2014 es una forma dar continuidad a defensas como esa de los Derechos sexuales: “implica ejercer una ciudadanía, como cubano, como hombre, como gay, como persona. Es sentir que tengo voz y es escuchada; es incidir, influir, mover estructuras, es construir lo necesario y deconstruir lo nocivo”. En tanto para Amaya Álvarez González, miembro de la Red de Juristas por los derechos sexuales, es “Compartir, dialogar, respetar, aunar, construir, hermanar, armonizar, en definitiva: amar, desde intereses comunes que nos vinculan como seres humanos y al mismo tiempo permitirnos contrastar experiencias desde nuestras distintas realidades, desde las particularidades políticas, sociales y culturales de cada una de nuestras regiones y países. Se convierte en un ejercicio genuino de valoración y comprobación de los avances y desafíos en lo que a derechos humanos se refiere. Otra oportunidad para cuestionarnos acerca de la colonización de nuestros cuerpos y nuestras mentes y comprender que deconstruir esos esquemas es puro acto de amor”. Seguro que no faltará, entre las conversiones durante el evento internacional, otros temas que marcan la cotidianidad del movimiento LGBTI en Cuba y entre ellos el de la posibilidad de una aceptación futura del matrimonio gay o de la adopción de niños. Una comentarista en Cubadebate, plataforma digital en la que se han generado no pocos debates sobre el tema, lo deja bastante claro en un reciente comentario: “Es hora ya de acabar con los tabúes y que cada cual defina su vida y elija libremente y de forma legal a la persona a la que quiera unirse. Basta de armarios y puertas cerradas. Y a estas personas les digo que luchen por sus derechos, pero ante todo, con respeto y consideración a las personas que les cuesta trabajo entenderlos, solamente así lograrán la aceptación final”. Tomado de Cubahora |